Pese a la presión de los gobernadores por la situación fiscal, el Gobierno nacional no tiene previsto recibirlos por el momento

Tras el pedido de los gobernadores de una reunión con el presidente Javier Milei para exponer la preocupación creciente por la disminución de recursos nacionales que son girados a las provincias, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, había insinuado un encuentro con un grupo reducido de mandatarios, pero desde Casa Rosada descartaron una convocatoria formal, argumentando que son las provincias quienes solicitan el diálogo.

El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, fue uno de los más enfáticos al describir el impacto de la crisis en las provincias. En una conferencia de prensa, señaló que la baja en el consumo, especialmente en productos esenciales, ha reducido significativamente la recaudación del IVA, un pilar clave de los recursos coparticipables. “El IVA depende del consumo, y si este cae, las provincias reciben menos. A eso se suma la eliminación de fondos nacionales como el incentivo docente, la compensación al transporte público, la extensión horaria escolar y la conectividad, que ahora debemos cubrir con presupuestos provinciales”, explicó Jaldo.

En esta línea el tranqueño había advertido: “Hoy no tenemos problemas financieros, pero si no actuamos a tiempo, los tendremos. La Nación debe escuchar y dejar de retener recursos injustamente”.

Presión en las arcas locales

La reunión en el Consejo Federal de Inversiones reflejó la urgencia de los gobernadores por alcanzar un acuerdo fiscal que sustituya al Pacto de Mayo, firmado el 9 de julio del año pasado, y que aborde las asimetrías entre provincias. Un informe del CFI proyecta una caída promedio de la recaudación del 4% para 2025. En Tucumán, las proyecciones del CFI destacan que las transferencias automáticas totales (que llegarían a los $2,56 billones) caerían un 3,8% este año, equivalente a $102,2 mil millones menos respecto a 2024.

Además, preocupa el posible cambio en la distribución del IVA, que podría perjudicar a 18 provincias si se divide en un componente nacional del 10% y otro provincial con alícuotas variables, según estimaciones del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf). En el caso específico de Tucumán, de avanzar la idea propuesta por la gestión libertaria, registraría un descenso en los ingresos del 16,9%, tomando en cuenta los recursos que recibe a partir de la sumatoria de la recaudación provincial, los envíos coparticipables, las transferencias no automáticas nacionales, los ingresos no tributarios, etcétera. El análisis determina que la alícuota local necesaria para mantener los ingresos actuales alcanzaría un nivel del 20,2%, lo que, sumado al 10% nacional, resultaría en un IVA total de 30,2%.

A pesar de la presión provincial, el Gobierno nacional parece postergar el debate. Fuentes de Casa Rosada indicaron al portal El Cronista que las reformas fiscales propuestas por los gobernadores no son viables en el corto plazo, especialmente en un año electoral, y que el Consejo de Mayo, integrado por figuras como el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, y otros representantes, trabajará en estas cuestiones para 2026. Los mandatarios, sin embargo, insisten en la necesidad de un diálogo inmediato. “No es habitual que todos los gobernadores nos unamos para pedir un trabajo serio con la Nación. Es un desafío en un año electoral, pero creemos que es posible”, expresó un vocero provincial.

La representación en las negociaciones incluirá a gobernadores de diversas regiones y fuerzas políticas, aunque Jaldo aclaró que no integrará la comisión. Los mandatarios buscan un acuerdo “preideológico” que contemple las necesidades de todas las provincias, subrayando que el federalismo debe traducirse en hechos. “La Argentina es la suma de sus provincias, y sin recursos no podemos garantizar servicios esenciales”, había recalcado Jaldo, urgiendo al Gobierno nacional a tomar medidas concretas para evitar un colapso financiero en los distritos.